Lo que sembramos… y lo que nos sorprendió

Verano en verde y rojo

🌱🍅 ¡Qué temporada tan sabrosa en el huerto! Este verano ha sido un festival de colores, sabores y aprendizajes. Nuestros hortelan@s han cultivado con mimo, compartido semillas, y cosechado no solo verduras, sino momentos únicos. Aunque alguna hortaliza se ha tomado vacaciones, el balance ha sido más que positivo. ¡Aquí van sus historias de cosecha y pasión verde! 💚👇

H1-Fiesta de tonos, trazos y tamaños (Kike)

Este año mis tomates se han vuelto locos: hay de todos los colores, tamaños y sabores. Pero lo que más me alegra es ver cómo otros hortelanos han sacado cosechas estupendas con las semillas que compartí. Para mí, eso es lo mejor del huerto: sembrar juntos y disfrutar los frutos de todos.

Tesoro de temporada: la cesta de Kike
Muestra de colores, formas y tamaños increíbles

H3-Del huerto al congelador: ¡invierno gourmet! (Maestro)

En esta temporada hemos contado con nuevos y buenos hortelanos. En mi caso, he trabajado mi huerto con mucho esmero y, por qué no decirlo, con bastante gusto. Le he dedicado unas cuantas horas. Algunas se perdieron cuando mi mujer me decía: “¡Venga, que nos vamos a Palencia!”
La cosecha de tomates y judías ha sido excelente, tan buena que he tenido que llenar el congelador con varias bolsas de estas delicias, ¡para disfrutarlas todo el invierno! En cambio, los pepinos y las lechugas no estuvieron por la labor este año… Se ve que no tenían ganas de crecer.
Ahora bien, si hay una auténtica reina en el huerto, esa es sin duda la calabaza: grande, amarilla, orgullosa…
El próximo año más y mejor. ¡¡¡¡Eso esperamos!!!!

Tesoro leguminoso: las pintas que pintan bien
iMi huerto, mi reino… y mi congelador!

H4-¡Semillas top y flores únicas! Los huertos están que se salen (Faela)

🌶️ ¡Cosecha a la vista! Los pimientos amarillos vienen de las plantitas que Kike nos regaló, ¡semillas top!
🌸 Las flores de Mar están de exposición: raras, preciosas, únicas.
📸 En la foto, los pimientos lucen como estrellas del huerto. ¡Que no falte de ná!

cosecha, pimientos, berenjenas, hortelana Faela
¡Explosión de color directo del huerto!

H7-Colorín colorado, el huerto ha florecido (Mar)

Las flores que me han acompañado en el huerto, flor morada de una alcachofa, Siempreviva en miniatura, espectacular, que sólo florece una vez en la vida, bella rosa roja con un aroma y formas increible y flores de primavera, entre otras, dispuestas alrededor de los cultivos de temporada. Un placer.
También se dejan ver en el huerto y favorecen la polinización de los cultivos!!🤞🏾

Polinización con glamour
Rosas, alcachofas y otras bellezas

H8-Judías, berenjenas y cero peros (Efraín)

Mi experiencia con el huerto ha sido enriquecedora, peros no encuentro ninguno, todo lo contrario super positivo. La verdad que no tiene nada que ver con lo que se compra a lo que cultivas. Los tomates negros riquísimos, las judías verdes, las berenjenas, las acelgas espectaculares, y los caricos no digo más😋.
En general muy bien. Punto negativo ninguno.
Los caricos fueron suministrados por Kike y Alejandro que han tenido mucho éxito con sus semilleros esta temporada.

Sin peros, con caricos del huerto de Efraín
Sin peros, con caricos

H9-La tierra respira, nosotros también (Alejandro y Cristina)

Termina la temporada de verano y comenzamos nuestro otoño-invierno con renovada alegría. Es maravilloso ver cómo la tierra agradecida se repone del esfuerzo de darnos sus frutos estivales y se prepara para la cosecha otoñal. Ya despuntan las plantitas de guisantes, coliflores , lombardas … Ya huele de nuevo a tierra limpia, fértil, abonada. Es el ciclo de la tierra, el ciclo de la vida, el esfuerzo de los hortelanos por cuidar su trocito de tierra que también es un trocito de su vida.

Hemos disfrutado de nuestros tomates, este año con menos sobresaltos que el anterior, los pimientos, las judías, las fresas. Todas nuestras hortalizas han salpicado de color nuestro huerto y deleitado nuestros paladares. El esfuerzo y la dedicación a la tierra provoca satisfacción por los frutos recogidos pero sobre todo da paz al alma.

Huerto de Alejandro, fresas, flores, judías
Sembrando paz, cosechando alegría
Colorín colorado, el verano ha terminado

H10-Entre calabacines y sueños (Montse)

Mi experiencia este año ha sido maravillosa, me ha dado la vida este verano el huerto. Lo que mejor se me ha dado han sido los pimientos, sobre todo los de padrón, los calabacines y las berenjenas, los tomates no me puedo quejar pero esperaba más. 🤭🤭
Estoy deseando renovar la adjudicación para el año que viene porque tengo pensadas un montón de mejoras.

La paleta del huerto: verde, rojo y morado
Color y sabor bajo el sol

H11-Crónica de un huerto feliz: del aroma al sabor (Elena)

En mi huerto, las hierbas aromáticas —romero, tomillo, albahaca, lavanda— han sido las grandes anfitrionas, atrayendo polinizadores y llenando de vida cada rincón. Gracias a ellas y al abono casero, la cosecha ha sido espectacular: brócoli, cebollas, lechugas, zanahorias, tomates, calabacines… ¡y la reina, la calabaza! 🎃
Los tomates nacieron de las semillas de Kike, y los calabacines del Maestro, que recibió un par de ejemplares de Faela la veterana del huerto. Con paciencia y su toque verde-mágico, el Maestro extrajo las semillas y les dio nueva vida. Todo cultivado con cariño y en clave de economía circular. 🌱

huerto de calabazas, Elena
Entre calabazas y carcajadas
Hierbas, calabazas y magia compartida: cosecha con corazón

A esas hortelanas y hortelanos Comillanos. Rosa

Introducción a un poema para los hortelanos

¡Qué maravilla de huertos!

Rincones donde la vida estalla en colores vivos y sabrosos.

Si los gusanos que habitan en ellos hablaran,

seguro dirían que viven en una selva paradisíaca, colmada de alimentos

y envuelta en el frescor de un follaje.

Y qué decir de quienes los crean…

¡son verdaderos magos de la tierra!

Con sus manos —y alguna que otra herramienta cómplice—

transforman la tierra en paisajes llenos de vida, belleza y sabor.

La naturaleza, generosa como siempre,

nos regala su exuberancia y sus ricos nutrientes,

invitándonos a llevar una vida más saludable.

Con cada tomate, una risa: el huerto canta historias de Comillas

Entre las suaves colinas de Cantabria y las casas que parecen abrazar el sol, algo especial crece en Comillas. Y no sólo hablamos de tomates. En el borde del casco urbano, donde antes había un terreno sin uso, hoy florece un rincón comunitario lleno de vida, gracias al apoyo del Ayuntamiento, que cedió el espacio, y al empuje incansable de los vecinos y vecinas que le dieron alma al proyecto. Así nacieron los huertos comunitarios del pueblo: un mosaico de colores, sabores… y sonrisas compartidas.

Los huertos comunitarios, Comillas

Cada mañana, cuando la niebla apenas empieza a desperezarse sobre los tejados, ya se oyen pasos entre los bancales. Ahí está **Faela**, una de las más experimentadas y queridas del grupo, con su inseparable perra **Nana**, revisando las plantas con el cariño de quien lleva años cultivando no solo hortalizas, sino también paciencia. Nada se le escapa: ni una hoja caída, ni una gota de sed.

huerto de Faela

Un par de bancales más allá, **Jose Antonio**, maestro jubilado y sabio del compostaje, pelea contra los caracoles con la paciencia de un monje zen. “¡Otra vez los gourmet estos!”, suelta entre risas mientras rescata una lechuga a medio devorar. Su huerto siempre está limpio, ordenado… y lleno de historias que solo él sabe contar.

huerto del maestro

Y si hablamos de producción, hay que mencionar al gran **Kike**, el **rey de los tomates y las alubias**. Tiene más variedades que un catálogo de semillas y está siempre dispuesto a echar una mano, regalar esquejes o soltar algún truco hortelano que solo se aprende tras años de mancharse las manos con gusto.

huerto de Kike

**Mar**, por su parte, es la artista de las flores y las hierbas aromáticas. Su rincón huele a verano, a campo, a sopa rica y a infusión curativa. Ella dice que planta con el corazón, y se nota: allí florecen hasta las sonrisas.

huerto de Mar

Pero el huerto más curioso es el de **Alejandro**, el **arquitecto de lo reutilizable**, que ha convertido su huerto en una obra maestra del reciclaje. Con materiales rescatados del punto limpio, ha montado bancales, invernadero y hasta un sistema de riego que parece sacado de un documental. Su huerto es una lección visual de cómo lo que otros desechan puede volver a la vida… y de qué manera.

huerto de Alejandro

Podríamos seguir nombrando a más personas —y cada una tiene su historia—, pero como se suele decir: una imagen vale más que mil palabras. Por eso, dejamos aquí un pequeño vídeo que muestra los esfuerzos y logros del resto del grupo, y que celebra lo más importante: que este lugar florece porque muchas manos trabajan juntas.

Porque en este rincón de Comillas no solo se cultivan calabacines, acelgas o flores. Se cultivan también amistades, memorias y un sentido de comunidad que se enraíza fuerte en la tierra y en el corazón de quienes lo cuidan.

Gracias al Ayuntamiento por creer en este proyecto. Y gracias, sobre todo, a las personas que, con cada herramienta compartida, cada semilla regalada y cada mañana de trabajo silencioso, han hecho de este lugar algo mucho más grande que un huerto.